Hoy
miércoles 09 de julio del 2025
Opinión 26-06-2021
CENTENARIO DE LA ESCUELA DE ARTILLERIA DE LINARES


Continuamos dando a conocer los orígenes de la fundación de la Escuela de Artillería de Linares, desde los primeros afanes de los linarenses, su creación en 1921 y hasta 1930, cuando se consolida en la Provincia y el país. (De nuestro libro inédito, Historia Militar de Linares)
CAPITULO 21
FUNDACION DE LA ESCUELA DE TIRO DE ARTILLERÍA, INFANTERIA Y GIMNASIA
El Presidente Alessandri, tras su viaje a Linares, tomó decisiones importantes referentes a las Unidades Castrenses de la zona. De esta forma, el 27 de mayo de 1921 se publicó en el Boletín de Leyes el Decreto Supremo N° 1231, mediante el cual se estableció:
“S. E. Dispuso hoy lo siguiente:
Que es de absoluta necesidad la existencia de las Escuelas de Tiro de Artillería, de Infantería y de Gimnasia General para que los Oficiales del Ejército puedan perfeccionar su instrucción teórica y práctica, y donde se puedan armonizar las prescripciones de los Reglamentos de Tiro y Gimnasia con las características de los nuevos materiales de guerra en uso. Que el Campo Militar “EL Culenar” fue adquirido con el exclusivo objeto de instalar allí dichas escuelas y,
Que existen el material técnico y los elementos que se necesitan para el funcionamiento de dichos Institutos,
DECRETO
1) Organícense las Escuelas de Tiro de Artillería, Infantería y Gimnasia en el Campo Militar “El Culenar”.
2) Que el Campo Militar “El Culenar” u otros campos donde se establecieren las mencionadas escuelas, dependerán del Inspector General del Ejército, quien lo distribuirá entre las diferentes secciones que allí se organicen
3) El Campo Militar estará a cargo de un Coronel Director General de la Escuela de Tiro y Gimnasia y tendrá a sus órdenes:
Al Director de la Escuela de Tiro de Artillería.
Al Director de la Escuela de Tiro de Infantería y ametralladoras.
Al Director de la Escuela General de Gimnasia.
4) Un Capitán Ayudante de la Escuela, y el personal, material y ganado que se indican en los artículos 66, 67 y 68 del Reglamento de Dotación de Paz N° 4, vigente para el año 1921”.
El Director General dirigirá el Curso de Informaciones para Oficiales Superiores.
5) Las diferentes Escuelas formaran un todo, a las órdenes del Director General, en cuanto se refiere a la parte administrativa, económica y disciplinaria.
6) La instrucción de los diferentes cursos se hará según directivas de los Inspectores del Arma, esto es, del Inspector de Artillería para la Escuela de Artillería, y del de Infantería para los demás cursos, quienes inspeccionaran su cumplimiento.
Tómese razón y comuníquese. Alessandri. Enrique Balmaceda”.
EL FUNDO CULENAR
Ahora bien, la propiedad de El Culenar, a la que se ha hecho mención, primitivamente, formaba parte de la Encomienda Peteroa otorgada por la Corona de España. En el siglo XVII, una parte de esta encomienda le fue dada a don Fernando de Ávalos, llamada Majada de Pequén. Esta concesión estaba formada por los títulos Santa Emilia, San José, los Maquis, el Carrizal, Orilla de Pequén, Guaycutén y el Culenar.
El Culenar, ahora bien, en su emplazamiento al sur de Villa Prat, llegó a ser una de las haciendas más importantes del departamento de Lontué. Fue vendida al Estado - como se ha dicho - en 1911, y pasó a ser utilizada como campo de maniobras y ejercicio de tiro del ejército, bajo la denominación de Campo Militar del Culenar. En 1921 - según se vio - se fundaron con base en el Culenar, las Escuelas de Tiro de Artillería, comandada por el Mayor Pedro Vignola y la de Infantería y Ejercicios dirigida por el Mayor Guillermo del Pozo.
El Culenar, ahora bien, en su emplazamiento al sur de Villa Prat, llegó a ser una de las haciendas más importantes del departamento de Lontué. Fue vendida al Estado - como se ha dicho - en 1911, y pasó a ser utilizada como campo de maniobras y ejercicio de tiro del ejército, bajo la denominación de Campo Militar del Culenar. En 1921 - según se vio - se fundaron con base en el Culenar, las Escuelas de Tiro de Artillería, comandada por el Mayor Pedro Vignola y la de Infantería y Ejercicios dirigida por el Mayor Guillermo del Pozo.
La adquisición de este predio se decidió tras crearse el 10 de noviembre de 1911 una comisión compuesta por los Generales José A. Soto Salas, José María Bari y el Teniente Coronel Emilio Segundo Sotomayor para visitar diversos fundos que pudieran cumplir con los requisitos de ser utilizados como campos de maniobra y tiro, en conformidad a lo dispuesto en Decreto Supremo del Ministerio de Guerra del 22 de febrero de 1911. Dicho terreno debía, en lo posible, estar cercano a la red ferroviaria central. La comisión propuso adquirir el fundo El Culenar de 15.700 hectáreas en la provincia de Talca161, lo cual se verificó el 22 de diciembre de 1911 para ser destinado a Polígono de Tiro de Infantería, Artillería, Escuela de Aviación y campo de maniobras y concentración. Sin embargo, la Escuela de Tiro y Gimnasia entró en receso y esta condición se mantuvo hasta 1921.
Ahora bien, la creación de la Escuela de Tiro de Artillería con sede en Talca, no preveía aún su instalación en Linares, lo cual ocurriría cuatro años más tarde. Por lo tanto, el Grupo de Artillería N° 3 del General Aldunate siguió como Guarnición de esta ciudad, como se ve a continuación.
LA DESTACADA INTERVENCION DEL GRUPO DE ARTILLERÍA GENERAL ALDUNATE EN LA SOCIEDAD LINARENSE DESDE 1922 a 1925.
Mientras el Grupo de Artillería Aldunate se afianzaba en Linares, con el apoyo de la ciudadanía y de las autoridades a todo nivel, uno de los forjadores de la construcción del Cuartel Militar en Linares, el General Pedro Pablo Dartnell Encina recibía, junto al General Luis Altamirano, la insignia de la Gran Cruz al Mérito Militar, otorgada por el Gobierno Español, en ceremonia efectuada en el Hotel Savoy y con la asistencia de las más altas autoridades del Gobierno chileno y de la Embajada hispana, todo ello, con motivo de la reciente visita al país de Su Alteza Real, el Infante don Fernando María de Baviera y Borbón.
El Soberano otorgó esta distinción al ilustre militar linarense, por cuanto, en 1898 - y dentro de un plan de adiestramiento - el entonces Capitán Dartnell sirvió en el Regimiento Pontoneros de la Península, a fin de adiestrarse en la construcción de puentes y trabajar en los Talleres de Maestranza del Ejército, Con tal motivo - expresó Dartnell en su discurso de agradecimiento - expresó su gratitud al Ejército Español y al Cuerpo de Ingenieros en particular, cuyos miembros - y que fueron sus compañeros de armas - le hicieron llegar una afectuosa salutación, la cual estaba suscrita por el General Antonio Los Arcos, General en Jefe de la Sección Ingenieros. La noticia es recibida y comentada con regocijo por la prensa local.
Aniversario del Grupo Aldunate
El 16 de enero de 1922, el Grupo Aldunate celebró el décimo aniversario de su fundación, efeméride que viene desde su destinación a la comuna de Retiro. Por ese motivo - y siendo ya esta fecha parte de los acontecimientos de la ciudad, recibe los saludos de autoridades y vecinos y se ofrece una comida en el casino de suboficiales, a la que concurren el Intendente, Alcalde y Regidores y diversos linarenses caracterizados.
Como parte de los festejos, se realiza una ceremonia militar, conjuntamente con una representación dramática patriótica, que se efectúa en una de las nuevas dependencias del Cuartel.
En la mañana se efectuaron fiestas deportivas y gimnasticas, mientras que la representación teatral se realizó en la tarde, con la asistencia de numeroso público, que aplaudió la puesta en escena, por cuanto “supo comprender los esfuerzos gastados por el personal que forma esta unidad militar”. En los discursos que se pronuncian con esa ocasión, se destaca que ya está construida gran parte de la infraestructura, quedando sólo fuera del inmueble la Comandancia del Cuerpo, además de los casinos de Oficiales y Suboficiales. Posteriormente, se informa de que están muy avanzadas las obras de la enfermería.
Lo cierto es que, tras la visita del Presidente Alessandri, las gestiones oficiales en beneficio de la construcción del Cuartel Militar fueron continuas y no se requirió de gestiones, audiencias ni diligencias en Santiago, muchas veces poco fructíferas.
Durante los meses de veranos, los trabajos fueron intensos y los avances notables. Ya el inmueble tenía el aspecto imponente que se conoce.
JAIME GONZALEZ COLVILLE
Academia Chilena de la Historia
Freddy Mora | Imprimir | 1498