EL FUTURO SE ESCRIBE CON NUESTRAS MANOS

05-10-2022


Marcelo Sepúlveda, profesor de Retiro

Nadie nos ha enseñado a sobrevivir, a definir el futuro, a construir sueños o quimeras, a ser responsable de cada uno de nuestros actos, a fortalecer el pensamiento, a desarrollar la ciencia y la innovación, a escuchar atentamente, las señales dadas por el universo circundante, cómo descomponer la materia o viajar a la velocidad de la luz, en síntesis es tan disminuida nuestra capacidad de intervención en la aldea global donde habitamos: ¿De qué modo podemos construir una mejor sociedad? ¿Cómo ser responsables de que toda la humanidad tenga lo suficiente y necesario para sobrevivir? ¿Cómo educar a las nuevas generaciones? ¿Quiénes son responsable de la política global y la economía dispar en un medio convulsionado?
Entonces; es hora de dedicar todo empeño en construir nuevas definiciones de habitabilidad del planeta, distribuir, equitativamente, la riqueza, permitir a todos y cada uno el derecho a la salud, la educación, a un trabajo digno, a una jubilosa jubilación que permita disfrutar de las maravillas del mundo que nos rodea, a una niñez en juego permanente y un universo magnífico para disfrutarlo en toda su maravilla.
La libertad permite elegir cada derrotero que nos parezca adecuado experimentar, construir escalas de valor, ser responsables de cada acción personal que implica intervenir la comunión de unos y otros entre pares. Es necesario escuchar las nuevas e innovadoras propuestas científicas del mundo académico; pero, también, la opinión exclusiva del individuo quien se merece el derecho a expresar su modo de pensar con libertad absoluta sin censura ni cuestionamiento arbitrario.
Nuestro mundo está siendo modificado desde sus cimientos estructurales, aquellas bases programáticas que gobernaron durante el último siglo están derrumbándose sin misterio para nadie; allí, frente a nuestra existencia. A poco andar, hemos asistido a cambio radical de época, definiéndose ésta por la masificación del mundo virtual y el acceso permanente a la conectividad y redes sociales de aquellos que, por privilegio, tiene cobertura, desplegándose una nueva discriminación: La de aquellos sin posibilidad de conexión a un red de internet.
Ahora se nos viene un nuevo orden, nuestros niños (nativos digitales) van a la velocidad de la luz en su aprendizaje; pero, lamentablemente, sólo aquellos privilegiados que pueden pagar una educación de calidad, o que poseen conectividad en este planeta rodeado por las microondas. Para discriminar, así, a una generación vagabunda, necesitada y menospreciada por la élite
¿Será posible sobrevivir en esta sociedad tan disgregada? ¿Caminaremos por la senda del entendimiento, la mesura y el equilibrio? ¿Dejaremos un legado en este mundo? Ha llegado la oportunidad de construir sin miedo al fracaso, opinar desde el personal punto de vista, todos somos parte de este entramado social y el futuro se escribe con nuestras manos


http://www.diarioelheraldo.cl/noticia/el-futuro-se-escribe-con-nuestras-manos | 20-04-2024 05:04:09