Con plazo para realizar indicaciones hasta el 5 de septiembre próximo quedó el proyecto que apunta a regular los dispositivos electrónicos que interfieran las señales o las telecomunicaciones. Esto luego que la Sala del Senado aprobara la idea de legislar de la iniciativa con 24 votos favorables, 2 en contra y 1 abstención.

Durante el debate en general, si bien diversos senadores y senadoras valoraron los objetivos de esta iniciativa, la mayoría puso de relieve la necesidad de introducir algunos perfeccionamientos para prevenir asimetrías y centrar la prohibición específicamente para el uso delictual de tales dispositivos.

Además, se solicitó tener en consideración que diversas instituciones públicas, tales como, Gendarmería o las policías deben utilizar estos elementos que se adquieren a través de compras públicas.

El texto en segundo trámite que tuvo su origen en un mensaje del Ejecutivo prohíbe la fabricación, comercialización, importación, exportación, utilización, tenencia y porte de dispositivos electrónicos aptos para interceptar, interferir o interrumpir cualquier tipo de señal que se emita a través de un servicio de telecomunicaciones, y establece sanciones en caso de incumplimiento.

Cabe precisar que durante los últimos años se han observado cambios en la forma de operar por parte del crimen organizado, particularmente por la creciente utilización de nuevas tecnologías que facilitan la ejecución de los delitos que llevan a cabo, a través de dispositivos inhibidores o interceptadores de señales y que son conocidos como “jammers”.